Los mensajes con un número de caracteres limitado es algo que existe desde hace mucho tiempo. Los SMS de los teléfonos móviles no están en su mejor momento, pero su limitación de caracteres creó toda una revolución en la forma de enviar texto usando abreviaturas. Con los años, la red social Twitter imitó esos mensajes cortos, y a la hora compartir enlaces se encontraroncon que estos podían ocupar la mayor parte del mensaje, o en ocasiones incluso no caber en el mismo. Por esta razón, se empezaron a usar los “acortadores de URL”: servicios que transforman las direcciones largas de los enlaces en versiones más cortas, que es la que se inserta en el mensaje.
A la hora de la verdad, lo que hacen esas URL cortas es que hagas un salto intermedio. Por ejemplo, si vamos con el acortador de Twitter, pasamos primero por el dominio “t.co”, y desde allí se nos redirige a donde pretendíamos ir originalmente. Pero claro, ese enlace al dominio acortador seguido por una ristra de caracteres carentes de sentido, a simple vista, no provee mucha información sobre a dónde vas. ¿No te estará llevando a un sitio malicioso?
Uno de los métodos más simples para evitar caer en trampas de phishing, o suplantación de sitios para robarte información, es asegurarte de comprobar la dirección. Esa es una de las razones por las que muchos consideramos que la idea de Google de ocultar las URLs en los resultados de búsqueda puede tener consecuencias muy peligrosas para los usuarios, y por lo que es bueno “expandir el enlace” acortado antes de acceder.
En el 2020 ha aumentado mucho el comercio online, y en consecuencia ha crecido la cantidad de amenazas en la red. Todos hemos pasado bastante tiempo en casa y tirado bastante de múltiples servicios de Internet, y “los malos” no han sido menos. Pero no hay que vivir con miedo, solo seguir unas buenas prácticas para navegar y estaremos más seguros.
¿Cómo me aseguro de que un enlace es bueno?
- Las prisas no son buenas consejeras. Si te recibes un mensaje, en la plataforma que sea (correo electrónico, SMS, red social, plataforma de mensajería), que te pida una acción rápida pulsando en un enlace, tómate siempre un momento para revisarlo.
- Antes de hacer click del tirón en un enlace, comprueba la URL. Cuando colocas el puntero (esa flechita del ratón) sobre él si estás usando el PC, o mantienes el dedo sobre el enlace en un dispositivo táctil, podrás ver la dirección URL hacia dónde va. Si la conoces y te parece fiable, adelante, ya has acabado.
- Si la URL del enlace no es legible a simple vista o resulta rara, recomiendo copiarlo y pegarlo en alguna aplicación de notas para mirarla con tranquilidad. Si es un enlace acortado, utiliza un sistema que te lo descifre, y decide después si abrir dicho enlace, o no:
- El buscador DuckDuckGo tiene la posibilidad de expandir desde su caja de búsqueda. Sólo debes escribir “expand” antes de una URL, y te devolverá como resultado de texto el salto completo al que te quieren enviar.
- Existen servicios como ExpandURL que no solo te expanden los enlaces mostrandote los diferentes saltos que hacen, sino que además te hacen una pequeña revisión de seguridad del sitio. Pega el enlace URL a expandir, revisa el informe y actúa en consecuencia.
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